La Habana/La visita de una delegación de funcionarios cubanos a la Administración de Seguridad del Transporte del Aeropuerto Internacional de Miami para un “intercambio de conocimientos” puso en alerta a muchos trabajadores de la terminal. Según un medio local, “algunos oficiales estadounidenses” consideran que “dejar entrar a los agentes de la dictadura de Cuba a esas instalaciones es haber dejado entrar a los espías castristas al corazón del aeropuerto”.
Aunque el reportaje publicado por Diario Las Américas no lo aclara, es probable que se trate de un encuentro concebido como parte del programa de cooperación en cuestiones de seguridad que sostienen Washington y La Habana. Esta colaboración prevé acciones como la visita a instituciones, el intercambio de información y el trabajo conjunto para, por ejemplo, evitar ataques terroristas u operaciones de narcotráfico.
Tampoco es la primera vez que desde Estados Unidos surgen reclamos por el acceso de funcionarios cubanos a “información sensible” sobre la seguridad nacional estadounidense, pese a que las autoridades de ambos Gobiernos han aclarado en diversas ocasiones que se trata de encuentros rutinarios que vienen ocurriendo desde hace décadas.
- CHECALO -
El reporte del medio de Miami da cuenta solamente de la presunta molestia entre los funcionarios estadounidenses
El reporte del medio de Miami da cuenta solamente de la presunta molestia entre los funcionarios estadounidenses. La fecha en que ocurrió la visita a las instalaciones del aeropuerto, sin embargo, tampoco se menciona, y la prensa oficial de la Isla no se hizo eco del encuentro.
Según la fuente del periódico estadounidense, algunos trabajadores cuestionaron que se le diera acceso a Cuba a “información sensible, una práctica reservada para representantes de países aliados”, ya que, según el testimonio ofrecido al medio, “se sabe que quienes gobiernan La Habana son amigos de todos nuestros enemigos”.
Asimismo, explicó que los funcionarios cubanos “tuvieron acceso directo a la nueva tecnología de rayos X tridimensional, entre cuyos objetivos está la identificación de explosivos para impedir que grupos terroristas los introduzcan en la cabina de un avión y otros sitios sensibles. Es algo inconcebible, absurdo, injustificable y muy peligroso”.
El “inusitado recorrido”, como lo definió, es el equivalente a “abrirle la puerta de nuestra seguridad a los oficiales cubanos, es haberle abierto la puerta también a Irán, Corea del Norte, Venezuela, Rusia y otros regímenes enemigos de la democracia estadounidense”, sentenció.
Un incidente que también atrajo las críticas sobre el acuerdo de cooperación de congresistas y políticos estadounidenses fue el encuentro programado entre miembros de las Tropas Guardafronteras cubanas y de la Guardia Costera de EE UU en Washington en marzo de 2023, que terminó cancelado.
El encuentro debía producirse en la sede de la Guardia Costera en Carolina del Norte
El encuentro debía producirse en la sede de la Guardia Costera en Carolina del Norte como parte del Programa Internacional de Seguridad Portuaria y se tenía prevista una reunión de miembros de los ministerios del Interior, de Relaciones Exteriores y de Transportes en la sede de Washington y un paseo por las instalaciones de Wilmington en barco. La visita, por desencuentros entre los Gobiernos, quedó reducida a solo esta última parte para evitar “una crisis diplomática mayor”.
En esa ocasión, numerosos miembros del Congreso pidieron la cancelación total de la visita. Es el caso del senador republicano de Florida Marco Rubio, que envió una carta instando al presidente Joe Biden a suspender un viaje que, a su juicio, permitía a agentes de inteligencia cubanos acceder a instalaciones sensibles de seguridad nacional.
El pasado enero un grupo de funcionarios estadounidenses se reunió en La Habana con representantes del Gobierno cubano para tratar temas de cooperación en seguridad y orden público. Estuvo presente en el encuentro personal del FBI, del Departamento de Seguridad Nacional y del Departamento de Estado, quienes pretendían crear nuevos acuerdos para “combatir la criminalidad” con la parte cubana.
En febrero, fueron las autoridades de la Isla las que se reunieron en Washington con representantes de ese país para discutir la colaboración en materia de seguridad y uno de los funcionarios de EE UU declaró que “la cooperación efectiva en asuntos penales puede incluir en ocasiones el intercambio de información, como información sobre fugitivos u otras personas buscadas”, aunque aclaró que estos encuentros son rutinarios.
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