La medalla de oro robada al boxeador cubano Yuriorkis Gamboa aparece en una subasta en EE UU

La Habana/La medalla de oro olímpica que conquistó el pugilista cubano Yuriorkis Gamboa, el Ciclón de Guantánamo, en Atenas 2004, tras vencer al francés Jérôme Thomas en la categoría de 51 kilogramos, es parte de un lote que la casa RR Auction puso en subasta el pasado 12 de diciembre y cuya puja final se dará el 16 de enero próximo. Por la presea se han presentado seis ofertas. La más reciente alcanza los 1.612 dólares, pero la subastadora espera obtener hasta 15.000.

La insignia fue uno de los objetos que perdió el pugilista durante un robo perpetrado a su casa en 2011. Según contó entonces al periodista de El Nuevo Herald Jorge Ebro también le fueron arrebatadas en esa ocasión varias “fajas profesionales, que paulatinamente fue recuperando con la ayuda de la Federación Internacional (FIB) y de la Asociación Mundial [de Boxeo] (AMB)”.

Luego de varias gestiones, el Comité Olímpico Internacional le entregó, en 2014, una réplica de la medalla de oro. “Ahora sí que esta medalla no se irá de mi lado. Uno puede ser campeón de muchas cosas en la vida, pero olímpico, eso es algo especial”, dijo el pugilista al tener en sus manos la copia del galardón.

La medalla dorada que oferta la casa RR Auction, ubicada en Boston (EE UU), tiene en el anverso a Atenea Niké –la diosa alada de la victoria– elevándose hacia el estadio Panathinaikós, con caracteres griegos y anillos olímpicos encima. En el reverso aparecen acuñadas la llama eterna de Olimpia, las primeras líneas de la Octava Oda Olímpica de Píndaro y el logotipo de los Juegos de Verano, con el deporte grabado en letras griegas en la parte inferior.

Yuriorkis Gamboa, que desertó en 2006 durante un campamento en Venezuela, tuvo que cumplir con el castigo de ocho años que impone el régimen a todo atleta que abandona una delegación deportiva si quiere regresar al país. El pugilista, que actualmente se encuentra en la Isla junto con su familia, no ha ofrecido su postura sobre la medalla que fue puesta en subasta. 

El boxeador profesional también fue “absuelto de toda culpa” en agosto pasado en el caso de un accidente de tráfico que le costó la vida a un peatón el 31 de diciembre de 2022. 

Además del oro en los JJ OO, Gamboa tiene en su palmarés otro oro en los Juegos Panamericanos (2003) y dos bronces, uno en el campeonato del Mundo (2005) y otro en los Juegos de América Central y el Caribe (2006).     

La casa de subastas RR Auction también ha puesto a la venta otras medallas de atletas cubanos. Además de la Gamboa, figuran en el lote dos de plata que consiguieron peloteros del equipo nacional en Sídney 2000 y Pekín 2008. Estas insignias, según el listado, pertenecen a coleccionistas.

En julio pasado fue subastada por 51.620 dólares la primera y única medalla de oro que ha conquistado un cubano en taekwondo. La insignia la ganó Ángel Valodia Matos Fuentes en Sídney 2000 al alemán Faissal Ebnoutalib en la división de 80 kilogramos. 

Otro caso es el del boxeador cubano Roniel Iglesias, que también se desprendió de su medallas conquistadas en Londres 2012 y Tokio 2020, y los guantes con los que conquistó su primera presea. Por estos trofeos obtuvo 123.271 dólares.

En los últimos años se han difundido varios testimonios de deportistas cubanos que han renunciado a sus medallas para sobrevivir en la Isla. El doble campeón olímpico de boxeo Mario Kindelán vendió la medalla de oro conseguida en Sídney 2000 porque «no tenía prácticamente nada para comer» ni para “mantener” a sus hijas.

Kindelán reconoció que era preferible entregar sus títulos a cambio de “un televisor o un frigo (refrigerador)” y reveló que recibía mensualmente 7.400 pesos (27 dólares al cambio del mercado informal de divisas) por su condición de campeón olímpico, lo que “no alcanzaba para comprar caramelos para sus hijos ni tenía la seguridad de comer”.