Europa Press
Periódico La Jornada
Sábado 20 de abril de 2024, p. 5
Madrid. El campo magnético de la Tierra nos protege de la peligrosa radiación del espacio, pero hace 41 mil años los rayos cósmicos atravesaron la atmósfera de nuestro planeta.
Científicos presentan nueva información sobre aquel fenómeno de excursión
en el que el campo magnético de nuestro planeta disminuyó y los dañinos rayos espaciales lo bombardearon.
- CHECALO -
El campo magnético de la Tierra protege a nuestro planeta del ataque de radiación cósmica que fluye a través del espacio y al mismo tiempo de las partículas cargadas arrojadas por el Sol. Pero el campo geomagnético no es estacionario. El norte magnético no sólo se tambalea, alejándose del norte verdadero (una ubicación geográficamente definida), sino que, ocasionalmente, se invierte. Durante estas inversiones, el norte se convierte en sur, el sur en norte y, en el proceso, la intensidad del campo magnético disminuye.
Excursiones del campo magnético
Pero también hay algo llamado excursiones del campo magnético, breves periodos en los que la intensidad del campo magnético disminuye y el dipolo (o dos polos magnéticos) que conocemos puede desaparecer, remplazado por múltiples polos magnéticos.
La excursión de Laschamps, que tuvo lugar hace unos 41 mil años, se encuentra entre las mejor estudiadas. Presenta una baja intensidad de campo magnético que implica una menor protección para la superficie terrestre de los dañinos rayos espaciales. Los periodos de baja intensidad del campo magnético podrían correlacionarse con grandes trastornos en la biosfera.
Para ver cuándo los rayos cósmicos bombardeaban intensamente la superficie de la Tierra, los científicos pueden medir radionucleidos cosmogénicos en núcleos tanto de hielo como de sedimentos marinos. Estos isótopos especiales se producen por la interacción entre los rayos cósmicos y la atmósfera terrestre; nacen de rayos cósmicos, por eso son cosmogénicos.
Los momentos de menor intensidad del campo paleomagnético (menos blindaje) deberían correlacionarse con tasas más altas de producción de radionúclidos cosmogénicos en la atmósfera.