Recetas fáciles para hacer aceites saborizados en casa

• 1 rollo de perejil (sólo sus hojas)

• 2 cabezas de ajo pelados

• Aceite vegeta

Preparación:

Para comenzar, se separan las hojas de un rollo de perejil y se pelan dos cabezas de ajo. Ambos ingredientes se trituran en un procesador hasta obtener una mezcla fina y homogénea. Luego, se coloca en un recipiente con cierre hermético y se cubre con suficiente aceite para evitar la oxidación de los vegetales. El frasco se conserva en refrigeración y puede mantenerse en buen estado durante al menos dos semanas.

Ingredientes:

• 1 cebolla mediana cortada en cuadritos finos

• 1 chile dulce cortado en cuadritos finos

• 1 zanahoria cortada en cuadritos finos

• 1 puerro rebanado finamente (acá pueden cambiar por 2 cebollinos)

• ½ taza de perejil cortado finamente

• 1 tallo de apio cortado finamente

• 5 dientes de ajo cortado finamente

• 2 hojas de laurel

• Aceite vegetal

Preparación:

Consejo: Para esta receta, necesitará un recipiente con tapa de rosca, pues estos vegetales deben mantenerse en refrigeración.

Todos los ingredientes deben cortarse en cubos pequeños o rebanadas finas, procurando que los tamaños sean similares. También se añaden dos hojas de laurel.

Una vez listos, se colocan dentro de un frasco con tapa de rosca y se cubren completamente con aceite vegetal. A medida que se utiliza la mezcla, es recomendable ir rellenando con más aceite, ya que los vegetales tienden a absorberlo. Esta preparación también se debe conservar en refrigeración y puede durar hasta dos semanas o más. 

Ajos Asados

Ingredientes:

• 5 cabezas de ajo

• 5 cucharaditas de aceite de oliva

Preparación:

Se precalienta el horno a 350 °F y se cortan las puntas superiores de cinco cabezas de ajo, dejando expuestos los dientes. Cada cabeza se coloca sobre un trozo de papel aluminio, se les añade un chorrito de aceite de oliva y se envuelven sin apretar demasiado. Las cabezas se colocan en una bandeja y se hornean durante 30 minutos.

Una vez fuera del horno, se dejan enfriar y se retira el papel aluminio. Para extraer la pulpa, basta con presionar la base de cada cabeza; los dientes saldrán fácilmente, listos para untar sobre pan tostado o agregar directamente a cualquier receta. Esta pasta de ajo se puede guardar en un recipiente hermético y conservar en refrigeración entre dos y tres semanas.

 

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