Japón se acaba de convertir en el quinto país en aterrizar una nave espacial en la Luna. Pero luego del alunizaje de SLIM, el equipo registró un problema grave que amenaza con interrumpir la misión. Se está quedando sin energía, porque sus paneles solares están en un ángulo equivocado.
Si el problema no se soluciona pronto, la sonda SLIM (Módulo de aterrizaje inteligente para investigar la Luna, por sus siglas en inglés) se apagará. La nave está funcionando enteramente con baterías. La Agencia de Exploración Aeroespacial de Japón (JAXA) realizó algunas maniobras para estirar el tiempo de operaciones, como apagar la calefacción, pero la energía igual alcanzará para unas horas más.
«La JAXA mantendrá el status quo en lugar de tomar medidas arriesgadas y espera que un cambio en el ángulo de la luz solar caiga sobre los paneles de una manera que pueda restaurar sus funciones», explicó Hitoshi Kuninaka, director del centro de investigación de la JAXA, en una rueda de prensa.
El ángulo del Sol en la luna tardará 30 días en cambiar, apuntó Kuninaka. «Así que cuando la dirección del sol cambie y la luz llegue desde una dirección diferente, podría terminar golpeando las células solares», agregó. La señal de SLIM se perdió la tarde de este viernes, según datos de la Red del Espacio Profundo de la NASA. No se sabe si fue una falla temporal u otra medida de ahorro de energía.
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Otra falla de Japón en su carrera hacia la Luna
La agencia japonesa lanzó la misión SLIM en septiembre del año pasado. La sonda, apodada el «francotirador lunar» por su precisión— comenzó su descenso en la Luna finalmente sobre las 15:00 UTC (16:00, hora peninsular española) de este viernes. La maniobra duró unos 20 minutos. Esta hazaña solo ha sido lograda antes por Estados Unidos, la Unión Soviética, China y la India.
Antes de esta falla, JAXA ha enfrentado otros inconvenientes clave en su carrera hacia la Luna. Había intentado su primer alunizaje en 2022, pero tuvo que abandonar la misión luego de perder contacto con el módulo de aterrizaje Omotenashi. Y en marzo pasado, fracasó el lanzamiento de su nuevo cohete insignia H3, con el que pretendía competir con otras empresas espaciales como SpaceX, fundada por Elon Musk. Esta falla provocó varios retrasos en sus misiones, incluyendo la de SLIM.
Incluso con el riesgo de quedarse sin energía, Japón considera exitoso el alunizaje. «La nave espacial envió datos de telemetría, lo que significa que la mayoría del equipo a bordo estaba funcionando», dijo el director de JAXA.
La agencia asegura que SLIM logró un aterrizaje suave. Sin embargo, se espera que tarde cerca de un mes en confirmar si alunizaron justo donde habían previsto. El plan era descender cerca del cráter Shioli, al sur del ecuador lunar. Si lograron la precisión esperada, representaría un gran paso entre «aterrizar donde podamos» y «aterrizar donde queramos», dijo JAXA. Estos aterrizajes de alta precisión serán cruciales para la futura exploración de la Luna.
SLIM llevaba a bordo dos pequeños robots, que han sido liberados durante el alunizaje. El primero es LEV-1, un pequeño rover de poco más de 2 kg, que cuenta con un termómetro y un sensor de radiación. El segundo se llama LEV-2, de apenas unos 250 gramos y equipado con dos cámaras. Ambos pueden enviar sus datos directamente a la Tierra. Se esperaba que lo hicieran pronto, pues tenían capacidad para estar operativos durante 40 minutos y 2 horas, respectivamente. AJAX dijo que seguirá informando sobre cualquier novedad.
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