OpenAI confirma lo que Samsung y Apple temían

OpenAI sigue buscando la forma no solo competir contra sus rivales en el campo de la IA, sino también de hacer frente a grandes empresas especializadas en el desarrollo de productos, tales como el smartphone. En una entrevista en el medio asiático Nikkei, Sam Altman, máximo responsable de la compañía, ha confirmado lo que Samsung y Apple temían. OpenAI tiene planes de lanzar dispositivos de IA que remplacen, incluso, a los móviles.

El objetivo de OpenAI, según Altman, es crear un dispositivo igual de innovador como lo fue el iPhone en 2007. De hecho, en la misma entrevista, el CEO de la compañía de inteligencia artificial también ha mostrado su intención de que esta sea capaz de desarrollar semiconductores propios para dichos dispositivos.

Por el momento, eso sí, Altman no ha revelado detalles sobre cómo podría ser este producto de IA capaz de reemplazar a los smartphones. No obstante, no es la primera vez que se habla de algo similar. En septiembre de 2024, Jony Ive, quien fue diseñador de Apple, confirmó que está trabajando en un dispositivo para OpenAI.

En un reportaje publicado por The New York Times, tanto Altman como Jony Ive debatieron sobre “cómo la IA generativa ha hecho posible crear un dispositivo informático, dado que la tecnología podía hacer más por los usuarios que el software tradicional”. Y pusieron como ejemplos dispositivos capaces de identificar y nombrar objetos, así como de “atender peticiones completas como la reserva de viajes”.

Una apuesta arriesgada para OpenAI

Todo parece apuntar que el dispositivo en el que trabaja OpenAI es un producto similar al al AI Pin de Humane o el Rabbit R1. No son smartphones, pero sí hacen muchas de las funciones de un dispositivo al uso, como reconocer el entorno para mostrar información relacionada, o actuar como asistente para realizar tareas y ayudar a las personas a ser más productivos.

El problema es que el tiempo ha demostrado que un dispositivo de IA es una apuesta muy arriesgada. El AI Pin ha sido todo un fracaso desde su lanzamiento por su elevado precio y su mal funcionamiento. El Rabbit R1, también ha estado envuelto en polémicas al no lograr cumplir las expectativas de los usuarios y al incluir una gran cantidad de fallos de seguridad en su sistema.

OpenAI, además, no es la única compañía que está trabajando en un dispositivo para reemplazar al smartphone. Otros fabricantes también tienen en sus planes crear un producto que, en cierto modo, queda sustituir al dispositivo que utilizamos diariamente. Hemos visto muchos ejemplos con las gafas de realidad mixta, que también parecen estar destinadas al fracaso.