Desarrollan aplicación con AI que detectaría cáncer de mama de manera temprana

Eirinet Gómez

Periódico La Jornada
Miércoles 18 de diciembre de 2024, p. 6

Con la ayuda de un sistema de inteligencia artificial, Susana Rivera Vergara, estudiante de Sistemas Computacionales en el Instituto Politécnico Nacional (IPN), desarrolla una aplicación que podrá detectar cáncer de mama de manera temprana a través del análisis del expediente clínico del paciente.

Para ello va a procesar una base de datos de más de mil 200 estudios médicos, que hay que limpiar y preparar para que, con algunas herramientas matemáticas, la computadora pueda detectar palabras claves.

Esto quiere decir que la IA trabajará a partir del lenguaje natural (la forma en que los humanos nos comunicamos por medio del habla o la escritura). En entrevista con La Jornada, Rivera Vergara, explicó que el procesamiento del habla natural es una rama de la ciencia computacional que permite a las máquinas entender, interpretar y generar lenguaje humano.

“Hay muchas formas de detectar el cáncer, puede ser por medio de imágenes, mamografías o radiografías, pero aún no se ha explorado la opción de tomar los ensayos clínicos y por medio de un algoritmo matemático detectar palabras claves para generar un diagnóstico oportuno.

Las máquinas se comunican por medio de ceros y unos, no entienden el idioma humano; entonces, lo que nos proponemos es que por medio de técnicas avanzadas, la IA identifique temas y patrones en grandes volúmenes de datos textuales.

Señaló que después de un primer año en el que cumplió varios requisitos administrativos para desarrollar su propuesta, trabajará 12 meses más en la recopilación de los datos que nutrirán su modelo y en el diseño del algoritmo que arroje resultados precisos.

La joven, quien también imparte clases a chicas de secundaria y preparatoria en temas de ciencia, tecnología, ingeniería y matemáticas (STEM por sus siglas en inglés), expuso que el sistema IA que desarrolla funcionará por medio de un formulario que será contestado por el médico, a partir de la exploración al paciente.

“Después la máquina va a leer los ensayos clínicos, como si fuera un humano, y va a decir ‘parece esto’, ‘puede ser esto’ o ‘no puede ser esto’ según la información obtenida.”

El objetivo de este proyecto no es remplazar al médico, sino ser una herramienta de ayuda para atender a más mujeres, puntualizó.

Con la asesoría de Olga Kolesnikova, profesora del Centro de Investigación en Computación (CIC) del IPN y experta en inteligencia artificial, Rivera Vergara indicó que el programa busca tener una precisión de diagnóstico de 65 por ciento.

Los sistemas de IA de este tipo en Estados Unidos tienen una precisión por arriba de 60 por ciento, nuestra meta es superar ese nivel y compararlo con otro modelo, mencionó.

El principal beneficio que busca alcanzar mediante esta iniciativa, que lleva el nombre Detección de cáncer de mama a través del lenguaje natural, es el de arrojar diagnósticos y prediagnósticos tempranos que puedan ser de gran valor para las pacientes.

En México hay muchos casos de cáncer y los procesos de detección son tardados, la finalidad es que con esta herramienta se pueda determinar la urgencia con que se deben ordenar los estudios y acotar los tiempos de diagnóstico. En enfermedades de este tipo, un diagnóstico temprano es clave para preservar la salud.

El trabajo de Rivera Vergara forma parte de seis historias que se cuentan en la serie de documentales cortos Haz que suceda, auspiciados por International Youth Foundation con el apoyo de Google.org.

La muestra, bajo la dirección de Tamara Yazbek Bernal, presenta la vida de seis jóvenes mujeres mexicanas que realizan el sueño de estudiar y hacer carreras en ciencia y tecnología, así como aportar soluciones a los problemas que afrontan al participar en estas áreas.

La historia de Rivera Vergara aparece junto a la de Sofía Galadriel Pulido Balderas, estudiante de Ciencias de la Tierra ENCiT, UNAM, quien en 2017 creó su propio canal de divulgación científica Ayuspaze, mediante el cual invita a niños, niñas y jóvenes a interesarse en la ciencia, la tecnología, la astronomía y la biodiversidad.

También sobresale la historia de Miriam Cruz Ramírez, originaria de Yuvila, Santa Catarina Ixtepeji, Oaxaca, quien tuvo que sortear las dificultades económicas hasta convertirse en una líder en ciencia y tecnología.