Empresarios chocolateros, cocineras tradicionales y cacaoteros reconocen novedades de esta fiesta y auguran un super festival el año que viene
Las Naves Chocolate y Cacao vibraron en el último día del 13º Festival del Chocolate, con los ríos de gente desbordando los pasillos y dejándose seducir por los intensos sabores de la chocolatería fina y nutricional, que ofrecieron chocolateros y productores de cacao de Tabasco y la región del sureste, además de países invitados como Honduras.
Los jóvenes que salían del Salón Origen, después de haber tenido una experiencia multisensorial inolvidable, comprendían ahora que ese murmullo de felicidad que retumbaba en los 12 mil 892 metros cuadrados donde tenía lugar el festival, se debían al consumo de chocolate de los visitantes, cuya molécula de feniletilamina asociada a la felicidad producía ese efecto en su ánimo.
Esa dicha fue la misma que, durante cuatro días, ofrecieron los expositores de confitería fina y los productores de cacao a los visitantes quienes que entraban fueron guiados a las conferencias, espectáculos y catas que tuvieron lugar.
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La gran cocinera tradicional Nelly Córdova Murillo, quien en esta edición del festival fungió como jurado y sufrió mucho para elegir a solo tres ganadoras en el Duelo de Fogones, resaltó que a pesar del poco tiempo que tuvieron los organizadores, se entrenaron bien y consiguieron ofrecer una versión única con un trato humano excepcional.
“Se respira un nuevo aire con ideas frescas y novedosas como lo ofrecido en el Salón Origen de la Nave Chocolate, donde cada visitante se llevó una experiencia multisensorial. Además, la atención que se brindó estuvo llena de amabilidad y cortesía, hicieron que este 13º Festival fuera puro corazón. Se siente, de verdad, el entusiasmo y cariño de cada participante involucrado en esta fiesta, y es la primera que organiza esta administración”, recalcó la gran embajadora de la comida tradicional tabasqueña.
El festival también sirvió para que viejos y nuevos protagonistas del cacao se encontraran e intercambiaran saberes e información. Cerca de su maravilloso módulo y rodeado de mujeres productoras de cacao, Vicente Cacep las aconsejaba para que realizaran las mejores ventas de su producto hacia Chiapas y les contaba la necesidad de que aprendieran a manejar las nuevas máquinas a su favor. En su opinión, los organizadores del Festival tienen un gran equipo porque “siempre es difícil sacar algo de cero porque hay cierta inercia, pero aquí con esto lograron sobrepasar las expectativas, este festival tiene mucho que decirnos ya”.
Sobre el futuro del cacao en Tabasco, Vicente Cacep consideró un gran acierto que ahora Sembrando Vida Tabasco incluya a los cacaoteros. “Va a ir más allá de la parte primaria y eso, es excelente porque cuando le enseñas al cacaotero qué hacer con su cacao, lo estas educando y le estas indicando una mejor forma de vender su grano, de darle un valor agregado. Ya somos origen del chocolate en el mundo, yo participé en esa comisión, pero ahora con Sembrando Vida Tabasco se va a enfocar al valor agregado del cacao, con el chocolate”.
Entre los asistentes a la conferencia del chef Mauricio Romo, estaba atento Emmanuel Sastré Lázaro, cuya madre Estela Lázaro sacó adelante desde hace 10 años una asociación de pequeñas productoras de cacao y una marca que ya se ha posicionado en el mercado de la chocolatería denominada Embajadoras de Cacao.
El hijo de doña Estela ha aprovechado este festival para nutrirse él mismo y aprender. Con apenas 20 años, el relevo generacional de productores del fruto verde está asegurado. El joven cuenta que, además del ejemplo de su madre, él se ha apasionado más por la historia cacaotera familiar, recorriendo sus plantaciones cerca de la Villa Tecolutilla, en Comalcalco, Tabasco.
A menos de una hora de que acabara la fiesta reveló que la barrita dulce llamada Bocaíto se agotó, y por lo que ha visto de sus vecinos en los módulos de al lado, también sus productos casi se acabaron. El reto para este digno heredero de la cultura del cacao es traer el próximo año al Festival del Chocolate una barrita de chocolate elaboradas a partir del chile amashito.
“La gente sabe que es un festival del chocolate, dónde ocurre y qué puede esperar. Para nosotros participar es un orgullo y una gran oportunidad. Nos vemos el próximo año con más chocolates, mientras les queda el gran sabor que se llevan los visitantes, el chocolate”, agregó.
La molécula de la felicidad a ritmo de “choco choco chocolate” desafiaba las nubes cargadas de lluvia y ponía a bailar a los asistentes que querían disfrutar del último segundo en el Salón Sabor a Tabasco. Con sabor, qué duda cabe, a choco choco chocolate.
“Gracias por acompañarnos. Gracias por estar aquí. Ayer sábado rompimos récord porque en tan solo tres días alcanzamos más de 150 mil asistentes. Agradezco a todos y todos los que hicieron posible esta 13° edición. Mes y medio después de que iniciamos podemos decir: lo hicimos. No fue una edición más, fue un capítulo que promete cosas buenas para todos”, agradeció Katia Ornelas.
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Esta información a su autor original y fue recopilada del sitio https://www.diariodetabasco.mx/tabasco/2024/11/17/deliciosos-sabores-que-dan-felicidad-amabilidad-de-productores-excelente-sazon-de-chefs-y-cocineras-tradicionales-distintivos-del-13-festival-del-chocolate-nos-vemos-el-proximo-ano/