Sigue la debacle del turismo en Cuba, con un 14% menos en los datos de julio

Lejos de mejorar, o siquiera de mantenerse, como ocurrió con las cifras de junio, el turismo en Cuba sigue hundiéndose. En julio, de acuerdo al reporte publicado este martes por la Oficina Nacional de Estadística e Información (Onei) llegaron al país 153.261 viajeros del exterior, una cifra similar a la del mismo mes de 2022, pero inferior en un 13,56% a la del año pasado, cuando se recibieron a 177.306 turistas.

Entre enero y julio, entraron un total de 1.463.097 viajeros internacionales, 26.230 menos –un 1,8%– que en el mismo período del año anterior. Aunque el primer mercado emisor sigue siendo Canadá –con 613.227 personas– el país norteamericano registra una caída en sus viajeros a la Isla, y lo mismo ocurre con otros países de Europa, como España, Italia y Francia.

Justamente en julio del año pasado, entró en vigor la medida de Estados Unidos de eliminar del visado rápido ESTA a los europeos que hayan estado en Cuba desde el 12 de enero de 2021 –fecha en que la Administración estadounidense incluyó a la Isla en la lista de Estados que apoyan el terrorismo–, razón que puede estar detrás de la disminución de turistas europeos.

También disminuyeron un 14,4% las visitas de cubanos residentes en el exterior: si en 2023 supusieron 210.026 personas entre enero y julio, en el mismo período de este año sumaron 179.746.

Por contra, subieron de manera ostensible los visitantes procedentes de Rusia, un 41%. Con 123.358 viajeros en los primeros siete meses de 2024, sigue siendo el segundo mercado emisor y, con los acuerdos bilaterales firmados en los últimos dos años, se prevé que siga creciendo.

En cualquier caso, se mantiene muy lejos el propósito del régimen de lograr en 2024 los 3,2 millones de visitantes internacionales, que ya era una cifra muy inferior a los datos previos a la pandemia de covid-19 (4,2 millones en 2019 y 4,6 millones en 2018), y que contrasta de manera dramática con los competidores directos de la Isla –el Caribe dominicano y el mexicano–, con máximos históricos de turistas en estos años posteriores al coronavirus.

La habilitación, hace unos días, de la eVisa para facilitar los trámites de entrada a Cuba tampoco se prevé que ayude mucho, teniendo en cuenta los problemas de conexión dentro de la Isla.

Al mismo tiempo, y de acuerdo a otro informe publicado este mismo martes por la Onei, Cuba incrementó en un 112% anual, más del doble, la inversión en hoteles y restaurantes en el primer semestre de 2024. En términos absolutos, destinaron 15.779,1 millones de pesos al sector Turismo, un 36,5% de los 43.120 millones de pesos ejecutados en los primeros seis meses del año.

Para Pedro Monreal, estos datos confirman la «persistencia de una estructura muy deformada de la inversión»

Si se dividen las inversiones por segmentos, el apartado Servicios empresariales, actividades inmobiliarias y de alquiler –que incluye la construcción de hoteles– acumuló el 26,4% de la inversión total ejecutada. Le sigue la industria manufacturera, con 19,5%, y hoteles y restaurantes, con 11,4%.

Frente a ello, el gasto público disminuyó en más de 20% en educación, construcción y administración pública.

Para el economista cubano Pedro Monreal, estos datos confirman la “persistencia de una estructura muy deformada de la inversión en Cuba”, con casi el 40% del gasto concentrado en actividades relacionados con el turismo. En un hilo en X, el especialista destaca la creciente inversión en hoteles y restaurantes “a pesar de la baja tasa de ocupación de 28,4%”.

De igual manera, llama la atención sobre la baja inversión agropecuaria, tan solo 2,5% del total del gasto público (15 veces menos lo que se destina al turismo), lo cual, a su juicio, indica que la “prioridad” oficial “respecto a la seguridad alimentaria no pasa de ser una consigna”.