La Habana/El juicio iniciado el pasado miércoles contra los jóvenes que protestaron contra el Gobierno en 2023 en Caimanera, Guantánamo, «está amañado». La denuncia la hizo en redes sociales Victoria Martínez Valdivia, madre de dos de los enjuiciados por desórdenes públicos, instigación a delinquir y atentados, alegando que existen inconsistencias en las declaraciones aportadas por la Fiscalía.
En un video compartido por CubaNet la madre de Luis Miguel Alarcón Martínez y Felipe Octavio Correa Martínez, que enfrentan sendas penas de seis años y tuvieron este miércoles la vista oral en el Tribunal Popular Municipal de Niceto Pérez, sostuvo que las declaraciones de los testigos en contra de los seis procesados no coinciden con las de hace un año.
Asimismo, señaló que su hija fue multada sin razón aparente tras testificar a favor de los detenidos por una supuesta incoherencia entre su testimonio actual y el que ofreció hace un año, cuando comenzó el proceso. En contraste, otras cuatro personas que también declararon, pero en contra de los jóvenes, y que al iniciar el juicio sostuvieron relatos diferentes a los que originalmente habían dado a la Policía, no recibieron ninguna sanción.
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La activista relató cómo la Fiscalía alega que su hija, quien testificó a favor de sus hermanos y el resto de los detenidos, les habría inculpado de los cargos
“Le leen (el testimonio) de hace un año, donde ella no estuvo de acuerdo con la declaración, porque (sostenía) que ella había dicho que los muchachos, principalmente su hermano Luis Miguel, habían dicho: ‘abajo la dictadura’, ‘abajo el Gobierno’. Y ella dice, ‘no, yo en ningún momento dije que mi hermano dijo eso’”, narró Martínez Valdivia.
La madre además confirmó que el activista y periodista independiente Yeris Curbelo Aguilera fue intimidado por la Seguridad del Estado, el pasado miércoles, para que se retirara inmediatamente cuando llegó hasta la sede del juzgado, que está a unos 45 minutos de la ciudad de Caimanera, con la intención de darle cobertura al caso.
La también activista contó que el juicio duró ocho horas y reiteró que en todo momento estuvo rodeado de un fuerte operativo militar que controló cada uno de los aspectos en torno al proceso, como este viernes adelantó 14ymedio, y advirtió sobre la prohibición de usar celulares bajo amenaza de la policía política.
En una entrevista concedida a Diario de Cuba, Martínez Valdivia alegó que la defensa realizó un buen trabajo frente al tribunal, pese a no tener buena comunicación con los familiares. «Considero que el abogado hizo una buena defensa, a pesar de que tenía desconfianza de él a partir de la poca comunicación que hemos tenido este año”, destacó.
El juicio contra de los seis jóvenes por los que la Fiscalía pide condenas que van entre los nueve y los cuatro años
El juicio contra de los seis jóvenes por los que la Fiscalía pide condenas que van entre los nueve y los cuatro años, se realiza como parte de la respuesta del régimen a las protestas antigubernamentales que en mayo de 2023 sacudieron el municipio de Caimanera, para exigir libertad y una vida digna para la población de la zona, cercana a la base militar de Estados Unidos en Guantánamo.
Desde el inicio la manifestación obtuvo una respuesta agresiva por parte del Gobierno, que no dudó en usar la fuerza para reprimir las protestas sacando a la calle a los llamados “boinas negras” (Fuerzas Especiales), y cortó el acceso a las comunicaciones.
La campaña de descrédito a quienes salieron a la calle dura hasta hoy de la mano de los medios oficialistas que intentan reducir los hechos a una «inusual manifestación» de unas decenas de personas con signos de haber consumido «bebidas alcohólicas». La misma acusación, a la que se suma la de «promover el caos», figura en la petición fiscal difundida por los familiares de los detenidos.
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