Más de la mitad de los barcos pesqueros de Las Tunas están parados por falta de piezas

La Habana/De los 23 barcos que componen la flota de pesca en Las Tunas actualmente solo funcionan ocho, es decir, el 65% de las embarcaciones disponibles están en desuso por no contar con las suficientes piezas de repuesto para echar a andar motores y baterías.

Así lo reveló la especialista en inversiones de la empresa estatal, Xiomara Concepción, en una entrevista concedida a Periódico 26, en donde detalló que la insuficiencia pesquera en la ciudad ha traído como consecuencia, entre otras cosas, un déficit de productos del mar en la red comercial local.

La escasez de pescados en Las Tunas es una realidad que, desde hace algunos años, puede corroborarse si se examina el suministro de alimentos derivados como croquetas, embutidos y picadillo. La situación les ha obligado a abastecerse de pescado en provincias vecinas como Holguín y Camagüey, de acuerdo con lo informado.

En marzo pasado el Gobierno eliminó definitivamente la obligación de firmar un contrato con una empresa autorizada para la comercialización, que tenían como obstáculo los pescadores no estatales para poder obtener una licencia.

Sin embargo, en el poco más de año y medio que lleva aprobada la resolución que, además, no considera entre sus planes a la langosta, no se ha visto ningún efecto. Lo que en lugares como Las Tunas se suma a la falta de embarcaciones.

Según los datos del Ministerio de la Industria Alimentaria el consumo de pescado cayó en Cuba de un promedio anual de 18 kilogramos hace treinta años a cerca de 3,8 kilogramos en 2022.  Hasta el momento las cifras que corresponden a 2023 no han sido dadas a conocer, pero nada indica que serán mejores.

Ante tal panorama, Yordan Rueda Paz, director técnico de Pescatun –la empresa comercializadora de pescado en la provincia–, explicó a la Agencia Cubana de Noticias que ya se prepara una inversión que supera los 16.370.000 pesos para fortalecer la industria pesquera tunera y que se labora, además, en la obtención de motores y otros equipos para la flota.

El proyecto incluye la creación y rehabilitación de centros de alevinaje, la dinamización de la industria y la obtención de recursos para la captura en la Empresa Pesquera de Las Tunas –como también se conoce a Pescatun–, durante el 2024.

«Durante las próximas jornadas debemos concluir con el montaje de las redes eléctricas, hidráulicas y el falso techo»

De acuerdo con el medio oficialista este no es el único proyecto para impulsar la producción de alimentos en la zona. Existen otros vinculados al sector agropecuario que se desarrollan en la provincia de Las Tunas y mediante ellos se han recibido tractores, sistemas de riego y otros recursos materiales.

El diario digital también reporta la capacitación a los productores privados y estatales para darle el uso más adecuado a la maquinaria adquirida y revertirlos en viandas, granos, frutas, hortalizas, carnes y otros renglones destinados a la población.

En las antípodas de la situación en Las Tunas está el sobrecumplimiento de la Empresa Pesquera de Santa Cruz del Sur, en Camagüey, que se enorgulleció  el pasado 6 de noviembre de haber capturado las 250 toneladas de langosta de su plan anual y estar en busca de más marisco.

A esta industria, destinada en su mayoría a la exportación y la alimentación hotelera, el régimen destina los recursos de los que dice no disponer cuando de la pesca de consumo nacional se trata.