E
l decreto de necesidad y urgencia (DNU) expedido por el presidente ultraliberal de Argentina, Javier Milei, tiene potencialmente implicaciones graves en la salud de la gran mayoría de la población. Deroga partes de la legislación, incluyendo artículos de la Constitución, lo que debe corresponder al Legislativo y no al Ejecutivo. Hay, de esta manera, una ilegalidad de origen y la única manera de regularizar los cambios es a través del Congreso.
El DNU se completó el 27/12 con la ley ómnibus, que consta de 644 artículos, que se justificaría por una profunda crisis global. De manera simultánea se están prohibiendo las manifestaciones dando amplias facultades de represión a la policía y las fuerzas armadas. No parece exagerado, entonces, sostener que se está ante un golpe de Estado pacífico
. Los cambios en salud y previsionales (pensiones) propuestos significa desaparecerlos como derechos sociales y humanos para convertirlos plenamente en mercancías.
El sistema argentino de salud y de pensiones es como en México un sistema segmentado y fragmentado. En salud hay tres grandes segmentos: el sistema público, perteneciente a las provincias; las Obras Sociales (OOSS) básicamente manejadas por los distintos sindicatos
, y la medicina privada denominada la medicina prepaga. A ello se añade el Programa de Asistencia Médica Integral (PAMI), cuya finalidad es brindar atención médica, social y asistencial a los adultos mayores. Estos subsistemas se combinan de distintas maneras, pero el sector privado ha crecido en importancia, ya que subcontrata con las OOSS. El Ministerio de Salud tiene esencialmente una función reguladora, pero además juega un papel importante en la producción nacional de medicamentos.
- CHECALO -
El DNU y la ley ómnibus pueden verse como culminación de un proceso zigzagueante, que ya tiene décadas. Se inició con el ajuste neoliberal del presidente Carlos Menem (1989-1999) y culminó con la fuga del presidente radical Fernando de la Rúa en un helicóptero desde el palacio presidencial en 2001. Siguieron varios presidentes de distintos partidos y no se logró estabilizar Argentina hasta la llegada del presidente Néstor Kirchner. Aparte de ser una lucha entre concepciones económicas es una confrontación entre fuerzas políticas en las que las corrientes del peronismo se confrontan con las fuerzas de derecha y ultraderecha.
En este enfrentamiento el poder de los sindicatos, que emana en parte de las OOSS, está en el centro, por lo que la regulación-desregulación de las Obras Sociales está en el centro. Esto contrasta con la seguridad social en México, que es tripartita y unificada con un director general perteneciente al gobierno; sabiduría en la construcción del Estado mexicano.
Algunos de los temas en materia sanitaria del DNU tienen un impacto regresivo. Deroga la ley que regula la producción pública de medicamentos. Desregula los aumentos de las cuotas de las prepagas, que pueden cobrar lo que quieran. Además, si una empresa prepaga quiebra, podrá desentenderse de sus afiliados. O sea, que no tendrá que transferir al afiliado a otra entidad. Para personas con enfermedades previas o de edad avanzada, será difícil conseguir otro servicio de salud. Las empresas estarán, además, facultadas para cobrar un diferencial por edad, algo que hacían en la práctica, pero que encontraba freno en los tribunales.
Se daña a los sindicatos achicando los ingresos de sus OOSS. Sin embargo, hay que reconocer que muchos sindicatos ya subrogaban la prestación de servicios con el sector privado, pero quedándose los sindicatos con parte de las cuotas.
Entre los temas positivos está la obligatoriedad de la receta digital. Sin embargo, también puede implicar que un paciente no acceda a una prescripción médica si está en un lugar sin acceso a Internet. Asimismo, los médicos deben recetar con el nombre genérico, lo que impide que podrá sugerir un medicamento en particular y habrá que optar al momento de compra en la farmacia. Por otra parte, hay una gran preocupación respecto de la capacidad del PAMI de seguir garantizando los medicamentos a los adultos mayores al liberar los precios y combatir el intervencionismo
público.
Las primeras reacciones frente al decreto de necesidad y urgencia y la ley ómnibus han sido de rechazo y manifestaciones callejeras, a pesar de nuevas reglas represivas para impedirlas. También varios gobernadores de las provincias han expresado sus objeciones en reuniones con el nuevo presidente. Si no fuera por una alianza de Milei y su partido cediendo prácticamente todo el gabinete al ex presidente de derecha Mauricio Macri, no existiría ninguna posibilidad de pasar los paquetes de decretos y leyes por el Congreso.
O sea, un partido gana y el otro pone sus votos del Congreso para aprobar leyes a cambio de la mayoría del gabinete. Por ello, se puede sugerir que se trata de un golpe de Estado blando, la nueva especialidad de la derecha y ultraderecha.