realme adelantó su apuesta de 2025 hace unos 15 días. Fue entonces cuando anunció buena parte de los detalles del realme 14 Pro y 14 Pro+, dos dispositivos de gama media premium para intentar batir a Xiaomi, Samsung y a futuros lanzamientos como el Nothing Phone (3a) Pro. Hoy mismo los ha presentado a detalle en Barcelona coincidiendo con el Mobile World Congress y, aunque ya te hemos contado todo sobre ellos, un servidor lleva unos cuantos días con el más importante del dúo, el realme 14 Pro+. ¿Mi intención? Contarte cómo es, qué novedades trae y si verdaderamente tiene potencial para batallar en un segmento medio con cada vez más móviles de calidad.
No tengo duda alguna: la firma ha hecho un buen trabajo de campo con este realme 14 Pro+. Ha analizado qué interesa a los usuarios para acertar con esos detalles que más se valoran cuando decides subir un poco el listón del precio. Porque, aunque este dispositivo se queda lejos de cifras tan comunes como los 1.000 euros, tampoco se sitúa en un rango económico.
El realme 14 Pro+ tiene un precio de lanzamiento de 529 euros en su versión de 8 GB de RAM y 256 GB de almacenamiento. Es innegable que se trata de una cifra elevada para el segmento medio, pero tiene muchos detalles que permiten a la compañía justificar este monto. No es el móvil con mejor relación calidad/precio del año, pero sí uno de los más sorprendentes que he probado durante 2025.

Un móvil único, literalmente
Todo aquel que compre este realme 14 Pro+ —en la versión Pearl White— puede decir que tiene un móvil único. La firma se ha sacado de la manga una parte trasera completamente innovadora en el modelo blanco y dorado. No solo presume de tener un patrón exclusivo y diferente para cada móvil que se vende, también ofrece una nueva tecnología llamada termochromic. ¿Qué es esto? Primero presta atención al vídeo que te dejo a continuación.
- CHECALO -
No es magia, aunque lo parece. Como puedes ver, la parte trasera de este realme 14 Pro+ cambia de color cuando la temperatura desciende de los 16 grados centígrados, tomando un tono azulado en algunas zonas del patrón que, sinceramente, ofrece una visual espectacular del móvil.
Además, aunque en el vídeo se ve un cambio drástico, cuando sales a la calle en invierno también es posible notar un ligero cambio de color, un detalle que le da un toque especial al dispositivo y permite disfrutar de una visual diferente dependiendo del lugar en el que estés o la temperatura del ambiente. De hecho, siempre dan ganas de girarlo para ver cómo está la zona trasera en ese momento.
Pero es que realme no se ha quedado solo en esta tecnología, también ha rematado la jugada una construcción sobresaliente, unos materiales bastante correctos y un peso y dimensiones dignas de admirar. El dispositivo cae a la perfección en la mano, y apuesta por una ergonomía suave y redondeada, desligándose de la tendencia de los marcos planos que casi todas las marcas están adoptando.
De hecho, la propia realme se ha salido un poco de su guion: deja a un lado las líneas agresivas, las aristas muy marcadas y los colores industriales para ofrecer una estética mucho más sofisticada, fina y elegante en este realme 14 Pro+. No es algo positivo o negativo, ojo, simplemente una cuestión de gustos. Eso sí, es innegable que el móvil rezuma calidad y, aunque habrá a quien no le guste, la armonía de todos los elementos da como resultado un dispositivo bastante bonito y ergonómico.
En una gama media cada vez más similar, cuesta encontrar opciones diferentes y únicas, pero realme ha sabido distinguirse. Pagando un precio elevado, eso sí, aunque ya te adelanto que sus 529 euros no solo justifican su buen diseño.


Una pantalla para disfrutar y un rendimiento para jugar
realme no ha bajado el listón al pensar qué pantalla debían incluir en este modelo. Si bien la compañía se deja por el camino algunos detalles como el HDR10+ o el Dolby Vision, completa la jugada con un diseño frontal y una visual verdaderamente increíble. Para empezar, los biseles son completamente simétricos y miden solo 1,6 milímetros, una cifra que marca el récord del segmento.
La cosa no acaba ahí, el realme 14 Pro+ ha optado por ofrecer un diseño semi curvo en todos los laterales. Ojo, la pantalla es plana, pero el cristal tiene una pequeña curva al final para fundirse con el marco metálico y hacer que pasar el dedo por esa zona del panel lleve la experiencia a otro nivel. De hecho, son detalles que suelen estar presentes en móviles el doble de caros, como el OnePlus 13, por ejemplo.
De nuevo, realme deja claro que ese precio del que hablaba al principio viene condicionado por apartados que no dejan indiferente a nadie. Se notan las ganas de hacer las cosas bien, y un ejemplo sencillo a la vez que importante son esos biseles simétricos de 1,6 mm. No solo porque se vean muy finos y estéticos, también permiten incluir un panel de 6,83 pulgadas en unas dimensiones bastante comedidas de 163,5 mm de altura y 77,3 mm de anchura.


¿Cómo se ve la pantalla? La realidad es que no tengo queja alguna. Los colores son vivos, el panel es fluido gracias a los 120 Hz, tiene una resolución 1,5K para asegurar la calidad de cualquier contenido y el nivel de brillo es suficiente —sin llegar a ser sobresaliente— para utilizar el móvil en exteriores sin demasiado problema. En este último punto podría haber optado por un nivel ligeralemente superior, pero no ha sido así.
Me parece un panel perfecto para consumir contenido multimedia y jugar, ya no solo por su calidad o tasa de refresco, sino por su tamaño. Llevando la diagonal hasta las 6,83 pulgadas, este realme 14 Pro+ se sitúa como uno de los móviles con mayor pantalla del segmento medio.
Y, ya que he sacado el tema de jugar, te cuento que no vas a tener problemas para correr casi cualquier juego de la Play Store. El realme 14 Pro+ se sitúa en lo más alto de la gama media gracias al chip Qualcomm Snapdragon 7s Gen 3 que, además, viene acompañado de un sistema de refrigeración más grande y eficiente que nunca.
El resultado es fácil de entender: se trata de una de las mejores configuraciones para jugar sin tener que subir la apuesta hasta la gama alta. El Snapdragon 7s Gen 3 tiene potencia suficiente para fluir por la interfaz y correr prácticamente cualquier juego con soltura. Por supuesto, tiene sus limitaciones cuando tratas de sacarle todo el jugo en entregas del más alto nivel gráfico o al priorizar cosas como la tasa de fps para jugar de forma competitiva.
Ahora bien, dejando esos casos específicos a un lado, el realme 14 Pro+ tiene el hardware interno suficiente para que el 99% de los usuarios no deban preocuparse por nada. Al apostar por el Snapdragon 7s Gen 3, la firma se ha asegurado fulminar cualquier duda respecto a su rendimiento, situándolo como una de esas opciones que a las que debes echar un vistazo si la potencia es una de tus condiciones inexorables.
Además, este chip tan eficiente se alía con una batería de 6.000 mAh que ofrece otra de las mejores bazas de este smartphone: una autonomía sublime. Es posible exprimirlo diariamente sin temor a quedarte tirado, pudiendo en algunas ocasiones pasar dos días sin tener que cargarlo.
Todo esto, con un diseño ligero y fino que es posible gracias a las baterías de silicio-carbono. Si no tienes mucha idea de qué es esto, simplemente debes tener en cuenta que son células que pueden almacenar más energía en el mismo espacio, lo que se resume en muchísima más autonomía sin tener que condicionar la estética o las dimensiones. Además de ser otra buena muestra del compromiso de realme por hacer un dispositivo sumamente competente.


El realme 14 Pro+ tiene una cámara para los amantes del zoom
realme ha rematado la jugada con un apartado de altura: la cámara. Es el primero de la clase —sin mirar hacia la gama alta— en optar por un sensor periscopio en su módulo fotográfico. Mientras el resto de marcas y modelos se empeñan en incluir sensores inútiles para hacer fotografías macro, realme ha querido ser de las primeras en apostar por el zoom óptico. Y esto, es una gran noticia para los amantes de la fotografía que no pueden permitirse un móvil carísimo.
Su cámara se compone de tres sensores: el principal, un ultra gran angular y el periscopio. Esta combinación hace que sea uno de los apartados fotográficos más versátiles del segmento, permitiendo sacar partido a esas tomas en las que debes acercar el encuadre para tomar la captura ideal. Hasta ahora, este tipo de cámara solo se podía encontrar dando el salto a la gama alta.
realme ha sido la encargada de democratizar el periscopio, y aunque la primera toma de contacto no lo pone a la altura del resto por motivos obvios —compite con móviles de 1.000 euros—, el resultado es bueno. La cámara tiene una visual bonita, ofrece un buen rango dinámico y es fácil tomar fotografías de calidad sin apenas ajustar la toma.


Además, este sensor periscopio es perfecto para los amantes de los retratos, pues permite obtener un desenfoque muy consistente y mantiene la calidad original sin necesidad de hacer recortes en la imagen. Todo esto, sumando a la ecuación una cantidad de IA contundente, filtros por doquier y una buena variedad de modos de disparo.
A riesgo de parecer repetitivo, este apartado vuelve a confirmar que el realme 14 Pro+ se sitúa un escalón por encima de la gama media, justo en ese segmento premium en el que pagando un poco más es posible llevar la experiencia a un nivel superior.
No creo que este realme 14 Pro+ tenga la mejor calidad del mercado, pero sí se consolida como una de las más útiles y versátiles, formando un buen equilibrio para competir en la batalla de las cámaras más top del año dentro de la gama media.


¿Merece la pena este realme 14 Pro+?
Tras probarlo durante días tengo algo claro: este realme 14 Pro+ no es para todo el mundo. La calidad de sus componentes es innegable, y la firma ha hecho un gran trabajo rematando cada detalle del dispositivo, pero 529 euros es un precio que superará las expectativas de muchos usuarios.
A cambio, realme ofrece uno de los mejores diseños de la gama media, una cámara única en el segmento —por ahora—, una pantalla de calidad con una diagonal y estética difícil de encontrar y un rendimiento en el top de la gama media. Es un gran dispositivo, pero rompe una barrera económica en la que, por un poco más, puedes optar a móviles con mejores prestaciones.
No en Samsung o Apple, que fijan sus gama alta por encima de los 1.000 euros, pero sí en su propio catálogo con opciones como el realme GT6, un móvil muy diferente en diseño, pero que mejora casi todos los apartados del protagonista de este análisis.
Ahora bien, si el diseño te ha entrado por los ojos y valoras los detalles como la cámara con periscopio o el rendimiento del Snapdragon 7s Gen 3, sin duda alguna es un móvil que merece la pena meter en el radar. Puede que no para pagar 529 euros por él, pero sí para estar atento a las ofertas y llevarte uno de los gama media del año con descuento.
DERECHOS DE AUTOR
Esta información pertenece a su autor original y fue recopilada del sitio https://hipertextual.com/2025/03/he-probado-el-primer-movil-que-cambia-de-color-con-el-frio-el-realme-14-pro-te-va-a-enamorar