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Periódico La Jornada
Jueves 20 de marzo de 2025, p. 6
Abiyán. El barrio de Anyama es un rincón cualquiera de Abiyán donde abundan los comercios, los niños juegan tranquilamente y las barbacoas humean en las esquinas, pero aquí sobrevivió el Homo sapiens hace 150 mil años, cuando la capital económica de Costa de Marfil era una inmensa selva tropical.
Arqueólogos y antropólogos de varias nacionalidades acaban de designar este barrio como el lugar de la presencia humana más antigua en un bosque tropical, según un estudio publicado en la revista Nature.
- CHECALO -
Antes de este hallazgo, los rastros del Homo sapiens –nuestra especie aparecida hace 300 mil años– aceptados por la ciencia en este tipo de entorno eran mucho más recientes, de no más de 70 mil años en Asia y Oceanía, señalan los investigadores.
En Abiyán quedan sólo 3 mil 500 hectáreas de bosque tropical en el Banco, un parque nacional en el centro de la ciudad que cada vez se va reduciendo debido a la urbanización.
Desde 1982, el arqueólogo marfileño François Guédé Yiodé, alertado por un geólogo, comenzó las excavaciones en Anyama en un terreno privado.
Junto con otros investigadores excavó varios metros de tierra bajo los cuales se ocultaban herramientas de piedra del Pleistoceno, un periodo del Paleolítico. Las hizo analizar y las conserva en su casa.
Tallados en sílex, cuarzo y otras rocas, los picos se utilizaban para partir materiales
, mientras otras herramientas, llamadas picadoras, con un borde afilado servían para cortar la piel de un animal, explica.
“Los bosques africanos no eran una barrera ecológica importante para el Homo sapiens hace 150 mil años”, concluyen los investigadores.
Además, los datos resaltan la importancia de los numerosos biomas (región que abarca un sólo clima) de África
, y su diversidad en la evolución de la humanidad, señalan.
Guédé Yiodé considera que el estudio debería convencer a la gente para que deje de poner en duda la existencia temprana del hombre en suelo africano
.