Alineación planetaria, oportunidad para mantener nuestra memoria astronómica

Javier Salinas Cesáreo

Corresponsal

Periódico La Jornada

Sábado 1º de marzo de 2025, p. 5

Teotihuacan, Méx., La alineación de los planetas maravilló a especialistas, aficionados y asistentes a la observación astronómica que se llevó a cabo ayer en Teotihuacan. Arqueoastrónomos consideraron este fenómeno como una oportunidad única para mantener viva una memoria histórica astronómica que forma parte de nuestra identidad mexicana.

Consideramos que estos fenómenos astronómicos son maravillosas oportunidades para poner las ciencias a disposición del público, organizando actividades culturales para maravillarnos del cielo, así como hicieron nuestros antepasados en su momento. Qué mejor que hacerlo desde Teotihuacan, la gran ciudad astronómica de Mesoamérica, afirmó el arqueoastrónomo, Aarón Uriel González Benítez, adscrito a la Sociedad Astronómica de Iztapalapa.

Explicó que la observación astronómica fue fundamental para que durante la época prehispánica se desarrollaran los calendarios rituales y la arquitectura astronómica.

Destacó que lo magistral de estos calendarios es que lograron sincronizar las actividades de las sociedades con los ciclos estacionales de la naturaleza y las posiciones de los astros en el horizonte.

Sostuvo que este fenómeno es una oportunidad para acercar la ciencia y la astronomía al público, y para que despierte en él la curiosidad por mirar al firmamento. También permite una aproximación a los ejercicios que realizaban nuestros antepasados, que mediante la observación del cielo lograron desarrollar calendarios y ciudades astronómicas que nos heredaron.

Es un fenómeno astronómico bonito, pero más allá de eso, traslada al público a su cultura astronómica, expresó.

Aarón Uriel e Ismael Arturo Montero García, de la Universidad del Tepeyac (UT), ofrecieron una conferencia en el Museo de Murales Teotihuacanos Beatriz de la Fuente, en la zona arqueológica de Teotihuacan, donde hablaron de la alineación y los planetas desde la época prehispánica.

Ahí, decenas de personas participaron en la jornada de observación astronómica. A pesar de que el cielo se mantuvo nublado, en la parte alta del museo se dispusieron telescopios, con los que los asistentes pudieron observar la alineación de Mercurio, Venus, Marte, Júpiter, Saturno, Neptuno y Urano, fenómeno que volverá a repetir hasta 2492.

Si viéramos los planetas desde el universo, no estarían alineados, cada uno tiene un lugar independiente, pero nosotros, desde una observación terrestre, vemos como que se alinean porque van desfilando; esto se debe a que transitan sobre una línea imaginaria. Alineaciones puede haber hasta dos o tres veces al año; sin embargo, lo extraordinario esta vez es la cantidad de planetas que participan, explicó Aarón Uriel González.

“Somos privilegiados porque hoy se cumple la muerte de Cuauhtémoc y es la alineación de los planetas que se da cada 500 años; imagínense que nos ha tocado verlo.

Somos muy aficionados a nuestra historia y a conocer más para hacer conciencia y valorar más a nuestro pueblo, expresó Luisa González, vecina del municipio de Tultepec.

Fausto Mendoza otro de los asistentes, proveniente de Chiautla, en el estado de México, opinó: Nos interesó venir para ver este fenómeno; sobre todo para entender el conocimiento que tenían nuestros ancestros, lo cual se ha perdido. Queremos empaparnos de lo que nos comparten los arqueoastrónomos.

Está es una oportunidad única por que esta alineación no se ve de manera frecuente. Acudimos para no perdernos este evento tan especial; sobre todo, queremos compartirlo con las nuevas generaciones para que crezcan con este conocimiento que ya se ya se ha perdido. Tenía que estar presente porque esto es único, manifestó.

Para Jorge Reséndiz, del municipio de Tultepec, acudir significó ser parte de la historia. Siempre me ha interesado la arqueología de México y he leído libros. Esperamos ver este fenómeno, el cual es muy interesante y pocas veces se ve en la vida. Acudir a Teotihuacan para verlo es un privilegio, sobre todo, porque apenas estoy conociendo la arqueoastronomía.