La ciencia no es fácil de predecir. No podemos saber qué grandes descubrimientos se producirán en el año que acaba de comenzar. Sin embargo, hay algunos hitos científicos de 2025 de los que ya tenemos una idea, pues se trata de fechas programadas o pasos adelante en investigaciones que ya han comenzado.
Desde la medicina hasta las ciencias del espacio, son muchas las disciplinas en las que se esperan grandes noticias. Puede que unas salgan bien y otras no; pero, si todo va según lo previsto, todos estos hitos científicos de 2025 vendrán para hacer historia.
Vamos a ver solo 5 de ellos. Habrá otros programados que no se encuentran en la lista y, sobre todo, otros muchos que ni siquiera esperamos. Algunas disciplinas, como la inteligencia artificial, la medicina de precisión o la genética, están avanzando con pasos de gigante, por lo que no sería nada raro conocer descubrimientos muy interesantes en esas áreas. Ante todo, esperamos que la ciencia no deba enfrentarse a retos como los que surgieron en 2020. Pero, si tiene que hacerlo, esperamos también que, gracias al trabajo de los científicos, la población disponga de las herramientas para lograrlo.
SpaceX se prepara para hacer historia
Últimamente es raro el año en el que SpaceX no hace historia de alguna manera. Esto no siempre es bueno. Sin duda, la contaminación lumínica de sus trenes de satélites no es la mejor forma de hacer historia. Pero también es cierto que, si hay que hablar de hitos científicos, la compañía espacial de Elon Musk suele ser un nombre muy recurrente.
- CHECALO -
Este 2024, por ejemplo, se consiguió por primera vez recuperar un cohete para su reutilización en plena caída a Tierra, gracias a unos brazos robóticos. Para 2025, los ingenieros de SpaceX planean hacer algo aún más increíble. Será en marzo cuando se pruebe el procedimiento por el cual una nave transferirá combustible a otra en pleno vuelo. Es algo que no se ha hecho nunca y que sería muy útil de cara a los viajes espaciales del futuro.
¿Un nuevo Ozempic entre los hitos científicos de 2025?
Sin duda, 2024 ha sido el año de Ozempic. Este fármaco, compuesto por semaglutida, se utiliza para el tratamiento de la diabetes, ya que ayuda al páncreas a liberar insulina cuando los niveles de glucosa en sangre son altos. Entre sus efectos secundarios cuenta con la reducción del apetito. Por eso, cuando se corrió la voz en las redes sociales de que podría ser un buen fármaco para adelgazar, los consumidores arrasaron en las farmacias. En los países en los que no hay un control de fármacos prescritos hubo un gran desabastecimiento y las personas con diabetes no pudieron acceder el medicamento que tanto necesitaban.
Se han hecho muchas campañas concienciación al respeto, pero, además, muchos científicos han reforzado su trabajo para dar con un fármaco que realmente sirva para perder peso. Así, no sería necesario recurrir al Ozempic. Hay algunos ensayos clínicos en marcha. Sin embargo, los que posiblemente den más de lo que hablar en 2025 serán los de la retratutida, un fármaco desarrollado por la farmacéutica Eli Lilly and Company, cuyo papel es actuar como receptor triple del glucagón. Esta es una hormona que participa en procesos como la regulación del gasto energético o la promoción de la saciedad. Por eso su uso sería muy interesante.
En la fase II de ensayos clínicos ya se han obtenido muy buenos resultados, con una reducción del 24% del peso de los participantes en solo 11 meses. Si todo va bien, en 2025 finalizará la fase III. Este podría ser uno de los hitos científicos del año, ya que supondría su pronta comercialización para el tratamiento de personas con obesidad.
Mejores tratamientos digestivos gracias a la microbiota
La microbiota digestiva, mal conocida como flora, lleva muchos años protagonizando hitos científicos e investigaciones esenciales para el avance de la medicina. Hoy en día sabemos que los microorganismos que viven naturalmente en nuestros intestinos nos protegen de muchas enfermedades y nos ayudan en procesos como la digestión. Pero, además, conocemos que se relacionan con otros sistemas del organismo. Incluso el funcionamiento del cerebro parece estar relacionado con la composición de la microbiota.
Hace tiempo que sabemos también que un trasplante de las heces de una persona sana puede ayudar a mejorar la variedad de microorganismos que componen la microbiota de alguien enfermo. Todo eso lleva estudiándose mucho tiempo, pero, dado el estado actual de las investigaciones abiertas, se espera que en 2025 haya muchos hitos científicos relacionados con esta área de la medicina.
El año de la computación cuántica
No está claro cuáles serán los hitos científicos en torno a la computación cuántica, pero está claro que será un año importante en ese aspecto. Al fin y al cabo, las Naciones Unidas han catalogado el 2025 como Año Internacional de la Ciencia y la Tecnología Cuántica (IYQ).
Se trata de una disciplina que está casi en pañales. Aún no se han hecho muchísimos avances, pero lo que se ha conseguido es realmente prometedor. Por ejemplo, recientemente IBM y la clínica Cleveland instalaron la primera computadora cuántica del mundo involucrada en la investigación de la atención médica . Gracias a ella, se están pudiendo abordar temas relacionados con el descubrimiento de nuevos medicamentos que aún no se habían podido procesar con las supercomputadoras actuales.
Ya hemos visto que la Inteligencia Artificial nos ayudará a descubrir nuevas proteínas con potencial farmacológico. De hecho, los algoritmos con los que se consiguen han sido protagonistas del Premio Nobel de Química de 2024. No será raro que en 2025 tengamos grandes hitos científicos en esta materia. Solo tenemos que esperar un poco para conocerlos.
Nuevas colaboraciones para protagonizar nuevos hitos científicos
Otro de los grandes hitos científicos de 2025 será la primera colaboración entre la Organización de Investigación Espacial India (ISRO) y la NASA. Juntas, lanzarán la nave NISAR, que se encargará de escanear gran parte de la tierra y el hielo de la misma casi todas las semanas. Gracias a dos instrumentos de radar que pueden ver a través de las nubes tanto de día como de noche, la nave medirá el movimiento de la superficie de la Tierra hasta fracciones de una pulgada. Esto ayudará a los científicos a rastrear los movimientos terrestres que pueden ser precursores de erupciones volcánicas y terremotos. Se trata de fenómenos que a día de hoy no se pueden predecir, por lo que, sin duda, estaríamos ante un gran hito científico si todo va bien.
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