La sequía pegó fuerte a los cultivos de papaya por lo que su costo se fue a las nubes: en los últimos meses el kilogramo se llegó a vender a 50 pesos, en la presente semana bajó un poco, pero todavía supera los 40 pesos, además las piezas están más pequeñas. La situación afecta a negocios que venden jugos, licuados y cóctel de frutas.
José Martín Hernández Muñoz, propietario de una verdulería, ubicada en la avenida 28 de Agosto, de esta ciudad, explica que las contingencias climatológicas provocaron que las papayas que hay en los comercios estén “caras y feas”. Hace cerca de un año este fruto se vendía entre 18 y 20 pesos, el kilo, en promedio.
Reconoce que tiene varios meses que esta fruta, que es bastante solicitada por las familias y que siempre se había caracterizado por ser de las más económicas, está al mismo nivel que las fresas, uvas y melocotones, por su alto costo.
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Toda esta situación, comenta, es producto de los meses de sequía que hubo en la entidad en la temporada de primavera y verano. “Los papayos no tuvieron el suficiente líquido para que sus frutos crecieron lo suficiente, además de que muchos ni dieron, así que ahora sufrimos por una producción disminuida”.
Explica que pese a que Veracruz es uno de los principales productores de este fruto, el tema de los fenómenos climatológicos le pagó a este fruto y por eso en este momento no baja de precio.
Hay poca producción de papaya
Anselmo Espinoza García, encargado de una frutería de la colonia Tamborrell, explica que es increíble que un fruto que es parte de las familias veracruzanas, como es la papaya, esté tan cara.
“Siempre hasta diría que era un fruto poco apreciado por lo barato que se podía encontrar, recuerdo que hace unos años una papaya no pasaba de 30 pesos la pieza, ahora el kilogramo está en 42 pesos, pero lo tuvimos en 54 hace algunos días”.
Comenta que para muchas familias la papaya es indispensable en su mesa porque es excelente para la digestión, así aunque su costo ande por las nubes, las personas la compran.
Explica que esperan que baje, pero en las siguientes semanas, porque sigue habiendo pocas, aunque son pequeñas y su aspecto no es tan estético, su costo se mantendrá caro hasta que haya más en el mercado.
¿Cómo afecta el precio de la papaya a las juguerías?
Tania López Díaz, quien trabaja en un negocio que venden licuados y jugos, comenta que resulta increíble que esta fruta sea tan cara, «siempre ha sido económica y es la que se utilizaba más por su costo y porque la buscan mucho para desayunar».
Un licuado de un vaso grande, más o menos 750 mililitros, en este momento cuesta 55 pesos, «sabemos que es caro, pero no hay de otra».
En el caso de la ensalada de frutas frescas, comenta que ahora le ponen más sandía y melón que están más accesibles, pero sí se utiliza porque los clientes la piden. Tienen un costo de 45 pesos.
Eduardo León Hernández quien vende coctel de frutas en el mercado Jáuregui, de esta ciudad, comenta que si les pega mucho, porque ahora es la papaya la que está cara y no tan alta calidad, pero luego son los duraznos, piña o fresas, así que siempre están escamoteando para poder salir adelante.
Sabemos que es algo del clima y que por eso la producción cayó, «la sustituimos con melón, naranja y sandía que están un poco menos caros», expuso.
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