Estados Unidos sólo puede cubrir la mitad de su fuerza laboral y, con su bajo crecimiento poblacional, el resto está en manos de los migrantes.
Escucha la entrevista con Miguel Del Castillo Negrete Rovira, jefe de la Unidad de Desarrollo Social de la sede Subregional de la CEPAL en México.
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IMER Noticias
Con la elección de Donald Trump en Estados Unidos, sobre todo, ante sus amenazas de cerrar el paso a las personas migrantes, el proteccionismo comercial y la imposición de aranceles, las estadísticas demuestran que Estados Unidos sólo puede cubrir el 51.1% de su fuerza laboral, el resto queda a cargo de personas migrantes.
Por ello, Miguel Del Castillo Negrete Rovira, jefe de la Unidad de Desarrollo Social de la sede Subregional de la CEPAL en México, señaló para la Primera Emisión de IMER Noticias con Alberto Nájar, que la migración es un fenómeno que depende de muchos factores. El primero es la atracción, un producto de la evolución demográfica de los países. Estados Unidos tiene bajo crecimiento poblacional y, por ello, depende de la mano de obra foránea.
Entre 2015 y 2024, la población que trabaja en Estados Unidos creció en 13.7 millones de personas. En su mayoría, cubierto por población hispana donde el 23.3% era población mexicana y 10% por población centroamericana.
Los sectores que más ocupan fuerza de trabajo son:
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Agricultura.
Construcción.
Servicios.
Transporte.
Del Castillo advirtió que, de aplicarse las medidas antimigrantes, traería grandes impactos a la economía de Estados Unidos porque gran parte de su crecimiento económico depende de las personas que llegan irregularmente a su país:
“Se habla de las medidas antimigrantes que van a entrar en Estados Unidos y lo que puede suceder es lo siguiente: en virtud de que hay esta necesidad de fuerza de trabajo, estas medidas se traducen en un deterioro para la vida de los hispanos en EU y para los trabajadores. Si evaluamos su situación de pobreza, 34.9% de los centroamericanos que llegaron entre el 2020 y 2024 están por abajo de la línea de pobreza. Es diferente ser pobre en EU a ser pobre en otros países”.
Recalcó que los países deben reconocer y aceptar la necesidad que tienen de ocupar mano de obra joven debido al envejecimiento de la población.
Y, el segundo factor, es de expulsión respecto a los países de los cuales las personas están buscando una salida.
¿Qué implican las decisiones de Trump?
No sólo la economía del país tendría efectos. Otro impacto importante recae es la vida diaria de las y los migrantes por el temor a ser deportados así como a sus condiciones labores. Cabe la posibilidad de que no haya un respeto a un trabajo decente.
El jefe de la Unidad de Desarrollo Social de la Comisión Económica para América Latina y el Caribe (CEPAL) recordó que migración es un derecho humano que establece el Artículo 13 de la Declaración Universal de los Derechos Humanos (DUDH).
Sin embargo, precisó que cuando las medidas migratorias se recrudecen, los migrantes no vuelven a sus lugares de nacimiento porque es más difícil ir y regresar, por lo que piden reunificarse con su familia lo más pronto posible.
Concluyó que, por su ubicación geográfica, México tiene la oportunidad de asegurar, regular y dar protección a las personas migrantes para que puedan pasar y llegar a su destino.
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