Ixhuatlancillo, Ver. – Las mayordomías, son eventos católicos donde se festejan a los santos, se veneran y con fiesta agradecen siembra, el buen clima y milagros familiares; sin embargo, estos se han ido perdiendo con el paso de los años, puesto que quienes deberían preservarlas están migrando por un mejor futuro, dijo Armando Rosas del Rosario, mayordomo de la iglesia de Ixhuatlancillo.
Temas como la migración de jóvenes quienes buscan una mejor educación y trabajo, son aspectos que hoy en día ponen en riesgos tradiciones y costumbres, en este caso, las mayordomías se están erradicando.
Armando, recuerda que cuando era niño, vivió estas tradiciones, de la mano de sus abuelos y padres, por lo que ahora las sigue haciendo y preservando, no obstante, él vive en carne propia el tema de la migración juvenil, pues su hijo se ha ido abriendo camino poco a poco en el ámbito musical.
Afirma que aunque este apegado a sus tradiciones, porque cada que viene las sigue con fervor, teme que su hijo las vaya perdiendo debido a la falta de continuidad para vivirlas.
- CHECALO -
Las mayordomías, que durante generaciones han sido un símbolo de unidad y celebración en Ixhuatlancillo, están en riesgo de desaparecer
Ser mayordomo implica servicio a la comunidad
El declarante comenta que este tipo de actividades religiosas están por desaparecer, debido a que actualmente no hay quienes sigan con esta tradición, pues los jóvenes desde su mayoría de edad buscan llegar a Estados Unidos y trabajar para darle un mejor futuro a los suyos, dejando sus tradiciones de lado.
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Recalca que para ser mayordomo no se requiere tener mucho dinero, sino hacer un servicio a la comunidad, con faenas y pintar, tener fe y creer en el trabajo comunitario, pues todo festejo es hecho por el pueblo, sin ayuda de autoridades municipales.
En Ixhuatlancillo, hay 26 mayordomos activos, pero lamentablemente, sin tener conocimiento de porque 12 imágenes ya no se adoran, las costumbres religiosas se pierden poco a poco, sin poder decir que ocurra en toda la región de las altas montañas, pero si en Ixhuatlancillo.
«Van cambiando de religión, pero yo invitó a la población a que participe porque es una experiencia bonita», indica. Por reglamento eclesiástico se establece que una persona puede ser mayordomo máximo dos años.
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