Arrojo, coreografía de Danzariega, cuestiona el deber ser asignado a las mujeres

Ana Mónica Rodríguez

Periódico La Jornada
Martes 27 de agosto de 2024, p. 9

Con una producción creada por mujeres que aborda la danza folclórica y el lenguaje escénico contemporáneo, se reflexiona sobre el deber ser asignado al género femenino en una sociedad patriarcal; éste es el eje del espectáculo Arrojo.

A un año de su estreno, la propuesta artística de Danzariega Folklor Experimental se presentará el primero de septiembre en el Teatro de la Ciudad Esperanza Iris, fecha en que la compañía celebra 23 años de trayectoria ininterrumpida.

Arrojo, relató Paula Herrera, una de las integrantes y guionistas, profundiza en la intimidad de las coreógrafas para conocer unas batallas contra el deber ser: la intensidad, la curiosidad, la timidez, contrastante e irruptiva. Éstas se develan como semilla de lo político y lo colectivo para imaginar nuevos caminos.

Cinco personajes plantean cómo se puede ser mujer más allá de lo que impone la sociedad al haber nacido con cuerpos con vulva y hacia el final se concreta el tema sobre cómo se acercan las mujeres al deseo, pensando que éste y la sexualidad son un área en la que particularmente el deber ser es aplastante.

Danzariega se ha caracterizado por reiterar el carácter político de la danza al cuestionar estereotipos que históricamente han limitado la capacidad de los ejecutantes, especialmente las mujeres, además de que explora nuevas posibilidades discursivas y estéticas.

Herrera detalló: “Al desdoblar la técnica de la danza folclórica en el escenario se conjugan zapateados, faldeos, sonoridades del cuerpo y dramaturgia. En Arrojo sobresale un vestuario inédito y la música es compuesta a partir de la percusión de los pies”.

El guion fue construido por Angélica Sánchez, Julieta Miranda, María Herrera, Norma Aguilera y Paula Herrera. En la colectiva también participan Donaji Peñaloza, Claudia Sotelo, Elisa Barajas, Merary Vieyra, Ilse Mar, Samantha Contreras y Valeria Gil.

Puntualizó: Un laboratorio de folclor expandido detonó las reflexiones sobre la sexualidad en cinco danzariegas que construyeron un discurso colectivo materializado, el cual multiplicó su fuerza vital a partir de la investigación-creación artística con todas las integrantes de la compañía.

En la obra se observan el zapateado y el faldeo, que son parte del lenguaje de la danza folclórica y lo demás es totalmente contemporáneo. No trabajamos basándonos en regiones, como regularmente se podría pensar, con coreografías de Jalisco o Veracruz.

En Danzariega Folklor Experimental es imprescindible escenificar la experiencia de ser mujer con la finalidad de denunciar violencias que llegan a naturalizarse socialmente en la determinación sexo genérica, y anunciar posibilidades de construcción al reconocer el deseo como motor para enfrentar múltiples batallas. Es decir, se descubre que el deseo es nuestro, como también el impulso que arroja con fuerza contra el deber ser, sostuvo la creadora.

Danzariega es una agrupación formada por 12 mujeres de distintas edades, corporalidades y bagajes culturales pero con un interés común: experimentar con el lenguaje escénico que se construye desde la danza folclórica. Es el cuestionamiento de la realidad social tejido en la diversidad de miradas que se conjuntan en la agrupación lo que enriquece sus producciones.

Arrojo se presentará el domingo 1º de septiembre a las 18 horas, en el Teatro de la Ciudad Esperanza Iris, Donceles 36, Centro Histórico, Metro Allende.