Madrid/México entregó a Cuba material eléctrico en concepto de donación por un valor superior a los 700.000 dólares entre 2022 y 2023, parte de los cuales fue a parar a la termoeléctrica Antonio Guiteras, en Matanzas. La cantidad ascendió a 112 toneladas y 5.500 piezas que se facilitaron sin recurrir a un acuerdo económico, lo que permitió eludir las sanciones del embargo de Washington, puesto que esos materiales llevan componentes estadounidenses.
Según el portal mexicano Latinus, con sede en EE UU, la Comisión Federal de Electricidad (CFE) mexicana, dirigida por el ex ministro Manuel Bartlett desde el inicio de la presidencia de Andrés Manuel López Obrador, hizo el primer donativo en el contexto del huracán Ian, que causó graves destrozos tras impactar en la Isla el 27 de septiembre de 2022. Uno de los daños más espectaculares fue el colapso del sistema eléctrico (SEN), que dejó a oscuras a toda la Isla.
Sin embargo, cinco meses más tarde, en febrero de 2023, cuando lo peor ya había pasado y el nuevo ministro de Energía y Minas cubano, Vicente de la O Levy, anunciaba un año de mayor estabilidad en el SEN, la CFE quitó a su termoeléctrica Adolfo López Mateos (ubicada en Tuxpan, Veracruz) tres válvulas valoradas en 4,7 millones de pesos (unos 261.000 dólares) que fueron enviadas a la Guiteras, aunque el reporte no menciona en qué estado se encontraban.
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La CFE quitó a su termoeléctrica Adolfo López Mateos tres válvulas valoradas en 4,7 millones de pesos (unos 261.000 dólares) que fueron enviadas a la Guiteras
Esta información aparece en uno de los documentos solicitados por Latinus a Transparencia, pero no es el único. En otro, con fecha del 21 de abril, de la misma central veracruzana se sacaron 1.000 metros cuadrados de cubierta metálica y 16 piezas, entre reguladores, compuertas, interruptores industriales y enfriadores de hidrógeno. El total asciende a 482.000 pesos (26.756 dólares), según consta en los justificantes de la donación, que indican específicamente que el retiro de esas piezas no afectaba las operaciones de la termoeléctrica mexicana.
Los donativos fueron a parar a la empresa estatal cubana Energoimport, perteneciente al Ministerio de Energía y Minas cubano, y con la cual –recuerda Latinus– varias empresas norteamericanas y europeas han suspendido negocios para evitar sanciones.
Además, la CFE también contribuyó con el envío de 16 especialistas a la Isla, que viajaron el 28 y 29 de septiembre de 2022 a Cuba y regresaron mayoritariamente el 10 de octubre. El objetivo era contribuir a la recuperación del sistema eléctrico cubano, según los informes de la comisión, obtenidos a través de Transparencia también por Latinus.
Uno de esos documentos describe la realización de 16 vuelos de la Secretaría de la Defensa Nacional para la primera entrega, que comprendía 69.000 metros de cable valorado en 3,5 millones de pesos (unos 194.000 dólares) y más de 9.000 aisladores para postes de luz, de aproximadamente 3,2 millones de pesos (más de 177.000 dólares). Según el informe, esos materiales no eran “indispensables” para el sistema eléctrico mexicano.
Uno de esos documentos describe la realización de 16 vuelos de la Secretaría de la Defensa Nacional para la primera entrega
Sin embargo, la noticia ha generado malestar en las últimas horas entre los muchos mexicanos que han reprochado la generosidad con Cuba cuando su país vive un momento crítico en el sector. Durante el pasado mes de mayo, en plena ola de calor, el país sufrió apagones masivos –dejando sin luz a 2,66 millones de clientes– y el Centro Nacional de Control de Energía llegó a declarar emergencia por la sobredemanda de electricidad. La entonces candidata presidencial por la oposición, Xóchitl Gálvez, tildó al Gobierno de López Obrador de “bruto e inepto” por privilegiar a la empresa estatal como productor eléctrico, en detrimento de los productores privados, reduciendo, a su juicio, la generación de energía.
La CFE alegó, sin embargo, que el sector público ha aumentado del 38% al 49% su capacidad generadora y que el hecho excepcional se debió a unas temperaturas desbocadas, de más de 44 grados en algunos casos.
La colaboración entre los Gobiernos de México y Cuba ha alcanzado cotas extraordinarias durante el mandato de López Obrador, admirador declarado del régimen de la Isla. Los acuerdos más significativos son en la contratación de médicos cubanos –que no se detendrá, sino todo lo contrario, con la presidenta electa Claudia Sheinbaum–, el envío de petróleo y combustible –que se acerca, se calcula, a los 600 millones de dólares desde 2023– y la contribución con piedra de Cienfuegos para el balastro del polémico Tren Maya.
La obra de ingeniería insigne del Gobierno mexicano debía llevar 200.000 toneladas de piedra cubana, aunque el negocio se ha visto frustrado por un cúmulo de incidencias que han hecho naufragar, sin que se conozcan los detalles, el acuerdo.
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