El Gobierno cubano cierra 45 negocios por no implementar el pago electrónico y pone en la mira a otros 893

La Habana/El diario del Partido Comunista publicó este jueves una lista de 45 negocios (el 60% de ellos del sector privado) cuyo cierre decretó el Gobierno por no incluir el electrónico entre sus medios de pago. La medida, anunciada con titulares severos por la prensa oficial, manda un mensaje claro a quienes violan el “derecho” al comercio electrónico, la regla de oro –asegura Granma– del proceso de bancarización decretado en agosto de 2023. 

Las 3.341 “acciones de control” que los inspectores lanzaron en febrero, relata Granma con tono policial, revelaron que 893 entidades –en particular trabajadores por cuenta propia y puntos de venta administrados por el Ministerio de Agricultura– “no cumplen” lo establecido por la Resolución 93/2023 de la cartera de Comercio Interior, la hoja de ruta de la bancarización. 

Tras la redada, se aplicaron 89 multas y se retiraron 75 autorizaciones comerciales, informó el diario. Mirurgia Ramírez, directora de Mercadotecnia del ministerio, informó que los inspectores están dirigiendo su atención “priorizada” a los negocios que presentaron deficiencias en inspecciones anteriores, en particular la que se realizó antes de aprobar la bancarización. 

Este febrero, explicó la funcionaria, el ministerio constató que no se ha inspeccionado con el mismo rigor a todas las provincias. En La Habana, Artemisa y Matanzas –ejemplifica– se han realizado “más acciones de control”, mientras que Cienfuegos y Holguín se quedaron atrás. Llama la atención que, pese a ello, ningún negocio de la capital fuera cerrado.

Este febrero, explicó la funcionaria, el ministerio constató que no se ha inspeccionado con el mismo rigor a todas las provincias

La conclusión es que “son insuficientes las medidas adoptadas” y existen “atrasos en la contratación y activación de los Códigos QR de Transfermóvil”, que imposibilitan la aplicación del pago electrónico. Luego de comentar la situación, Granma publicó la lista de negocios “cerrados”. En Matanzas, suspendieron a tres unidades de gastronomía. En Cienfuegos, tres bodegas estatales, un punto de venta de la financiera Cimex y varios puestos de venta a cargo del Ministerio de la Agricultura y uno de la Construcción. 

En Ciego de Ávila, el sector privado fue el más afectado –una constante que se repitió en las provincias orientales–: cerraron sus puertas cuatro trabajadores por cuenta propia y dos mipymes, un organopónico y una cooperativa, además de un Instituto de Belleza. Por su parte, los inspectores de Holguín y Granma clausuraron varios puntos de venta estatales. 

Santiago de Cuba se quedó sin dos cafeterías y un restaurante, y Guantánamo vio el cierre de la tienda La Tijera, administrada por el conglomerado militar Gaesa. Isla de la Juventud impedirá el trabajo de cinco trabajadores por cuenta propia y una mipyme, además de un taller poliservicio en Nueva Gerona.

“¿Se cumple lo establecido?”. La pregunta de Granma, con la intención de ser retórica, queda respondida por los números. No obstante, el diario no dedica una sola línea a describir los azotes de cualquier proceso electrónico en Cuba: la pésima conexión a internet –que llega a ser inexistente en puntos remotos de la Isla–, los constantes apagones que afecta la conectividad de los aparatos, y la falta de terminales de pago, además de otros dispositivos. 

El voluntarismo y las advertencias legales marcan el tono del diario del Partido Comunista, para el que, si la bancarización enfrenta múltiples obstáculos y deficiencias, las respuestas hay que buscarlas en la negligencia de los negocios, y no en la crisis estructural del país. Para denunciar al infractor, recuerda Granma, las líneas están abiertas.