Colonia Revolución sigue creciendo y el agua falta aún más; escasez tiene más de 8 años

La falta de agua en la colonia Revolución y sus alrededores se ha complicado desde hace ocho años aproximadamente, a causa del crecimiento de la mancha urbana, según vecinos de esa zona.

Señalan que ahora son más las familias que requieren del servicio de agua potable y que la situación se complica durante cada temporada de sequía y estiaje.

Rosa García Vargas vive en la Revolución y dice que la falta de agua es constante en esa colonia, al grado de que en ocasiones se quedan sin servicio durante más de una semana.

«La CMAS maneja un calendario de tandeos, pero no se respeta, pues según tenemos un día con agua y tres sin ella, cuando en realidad pasan los días sin que llegue el servicio», abunda.

Rafael Roldán, habitante de la colonia Naranjal, sostiene que ante la falta de agua basta con cinco días para que su tanque de mil litros quede vacío.

«En casa somos siete personas y aunque usamos lo indispensable casi siempre se nos acaba, pues (el servicio) tarda hasta una semana en llegar», agrega.

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También manifiesta que cuando se prolonga la falta de agua se comunican con la CMAS para solicitar el servicio; «a veces no responden y cuando lo hacen nomás nos dicen que van a abrir las válvulas a la brevedad, pero siempre tenemos que esperar varios días».

En ocasiones, manifiestan, tienen que cooperar para contratar los servicios de pipas; el viaje de 10 mil litros se los cobran en 700 pesos.

Otra vecina de la Revolución permitió entrar a su casa para demostrar que no caía agua a través de la red de suministro. También enseñó un tanque que mandó a construir desde hace dos años para contar con reservas.

«Llegué a vivir a esta colonia (Revolución) hace como diez años y de ocho años a la fecha el agua suele faltar y eso se debe a que hay más casas; las colonias han crecido», abunda.

Finalmente, piden a la CMAS respetar el programa de tandeos y con ello garantizar que las familias tengan agua y puedan almacenar lo necesario para pasar la temporada de sequía y estiaje.