Entre las nuevas medidas dictadas por el gobierno de La Habana sobre higiene y servicios comunales, una ha causado especial irritación. Se trata de la prohibición de mascotas o animales de corral en las playas, así como en cementerios o basureros, lo cual puede conllevar, según la resolución que entró en vigor el miércoles de esta semana, entre 1.500 y 2.000 pesos de multa.
La asociación Cubanos en Defensa de los Animales (Ceda) declaró su «completo desacuerdo» con el artículo en una publicación en sus redes sociales, pues, argumenta, va en contra del Decreto Ley de Bienestar Animal. Este dice expresamente que «los dueños de mascotas deben recoger los residuos y suciedad que estos generen», explican en su texto, donde proponen: «Se pueden establecer playas en las que las mascotas no puedan ir, o meses del año en los que las mascotas no deben ir, u horarios del día. Pero es inaceptable que se prohíba a las mascotas en las áreas de relajación de sus familias».
La CEDA opina también que «gracias a que hay personas que se ocupan de su salud y alimentación», los animales que estarían «en esos lugares de cualquier manera, por ejemplo en cementerios», no son «un peligro para la sociedad, y se convierten en un beneficio, porque aumentan la seguridad de las zonas, crean un espacio más ameno entre las personas y dejan de reproducirse al ser esterilizados».
- CHECALO -
«No aceptamos que se penalice a las personas que atienden a los pocos animales que realmente no causan problemas de higiene»
En Cuba hay «millones de animales callejeros», concluye la asociación: «No aceptamos que se penalice a las personas que atienden a los pocos animales que realmente no causan problemas de higiene, más aún, cuando no existen refugios o soluciones gubernamentales para mitigar la situación de tantos animales sufriendo y en críticas condiciones en las calles».
Otro activista por los animales, identificado en redes como Filoxiraptor, esgrimía: «Las playas y sus áreas aledañas no las ensucian los animales y nunca he visto a las autoridades poner multas por el incumplimiento de esta medida para las personas naturales y jurídicas».
El protector decía, además, que si hay «animales comunitarios» (callejeros) es «por abandonos y falta de campañas de concientización en el país» y que, incluso, «la mayoría de los veterinarios por falta de recursos indican llevarlos a la playa para mejorar problemas en la piel, tonificar músculos y procesos de rehabilitación».
De visita este viernes en las playas de Santa María, la zona del otrora hotel Marazul, y Mégano, al este de la capital, 14ymedio observó que no había mascotas en la playa. Sin embargo, no es porque se esté implementando con rigor la nueva norma, sino porque, para empezar, es lo que ocurre habitualmente.
«No es usual traer animales porque la mayoría de los que venimos nos trasladamos en transporte público, donde están prohibidos», explica a este diario una bañista que cuenta que dejó a sus dos perros en casa, en Centro Habana, y que no está de acuerdo con la medida. «Sería el colmo, con la puercada que hay en todos lados, que la tomen con los animales». Y señala un montón de latas arrojadas a la arena, con ironía: «Los perritos dejaron todo esto por aquí, seguro».
«No hay que coger lucha, si no hay policías en la calle, imagínate tú inspectores», razonaba el socorrista
Por otra parte, preguntado por las nuevas reglas, un socorrista aventuró que no habría ningún problema en llevar mascotas a la playa. «No hay que coger lucha, si no hay policías en la calle, imagínate tú inspectores», razonaba el hombre.
El artículo referido a los animales no es el único que ha despertado molestia de la nueva normativa, que incluye sanciones de 2.000 a 3.000 pesos a quienes incumplan el horario establecido para depositar en los contenedores los desechos. Los comentarios a la noticia en el oficialista Cubadebate dan fe de ello.
«Esas medidas están muy bonitas y me gustarían que se aplicaran, pero yo quiero que me digan dónde echo la basura cuando los contenedores están llenos, porque que yo sepa los camiones de recoger basura no pasan a diario y los contenedores se llenan en menos de un día», opina un usuario identificado como Daniel. En el mismo sentido se expresa Besteiro: «En mi barrio (reparto EMBIL, Boyeros) es muy común que pasen 10 días o más sin recoger los desechos, y con el tanque lleno, ¿dónde se deposita la basura?».
Latino se pregunta: «¿Qué hacen con los que se roban las ruedas de los contenedores de basura y después hacen carretillas y pasan con ellas delante de la policía? ¿Qué hacen con los trabajadores de Comunales que tiran los tanques desde los camiones y, nuevos, los rompen?».
«Solo movilizar la conciencia popular, ¿y el resto dónde queda? La obligación de Comunales como servidor público, y causante de todo este desastre, ¿ya no cuenta?», cuestiona la comentarista Paloma, que enumera: «Basureros gigantes, alcantarillado obstruido, salideros de larga data, calles sin barrer, derrame de aguas negras, hierbas sin cortar, aceras destruidas por las palas recolectoras de basura, trabajadores indolentes que maltratan los depósitos y dejan la calle llena de basura, y mucho más, no tiene nada que ver con la conciencia popular».
________________________
Colabora con nuestro trabajo:
El equipo de 14ymedio está comprometido con hacer un periodismo serio que refleje la realidad de la Cuba profunda. Gracias por acompañarnos en este largo camino. Te invitamos a que continúes apoyándonos, pero esta vez haciéndote miembro de nuestro diario. Juntos podemos seguir transformando el periodismo en Cuba.
DERECHOS DE AUTOR
Esta información pertenece a su autor original y fue recopilada del sitio https://www.14ymedio.com/cuba/Habana-prohibe-perros-playas_0_3610438932.html